Everything starts from a dot




Quienes venimos del mundo de la comunicación tenemos una costumbre casi inevitable: tomar notas, ideas, frases, inquietudes, certezas y, sobre todo, realidades.

Hace poco abrí mi libreta fetiche, esa de color amarillo que compré en mi tienda favorita en un Sant Jordi, que me acompaña desde que decidí que la comunicación y la creatividad son mucho más humanas cuando buscan transformar vidas y no solo vender. Entre sus páginas reencontré muchas de mis propias palabras, y ahí entendí por qué hoy vuelvo a escribir después de tanto tiempo: porque todo empieza en un punto… y el mío se está expandiendo...

Everything starts from a dot

Después de recibir un premio en comunicación social, de formarme en economía social y solidaria y de seguir sumergiéndome en la publicidad, ahora desde una agencia especializada en comunicación ciudadana, me di cuenta de algo: mi camino me estaba preparando para dar el salto. Estoy emprendiendo, no para tener una marca más, sino para generar impacto social real. Para demostrar que la comunicación puede ser motor de cambio, puente y herramienta de cohesión.


Porque comunicar es conectar.

Porque la gente olvidará lo que dices, lo que haces… pero nunca olvidará cómo la haces sentir.

Porque una mujer con voz es, por definición, una mujer fuerte.

Porque el éxito no está en la suerte, sino en la persistencia.

Porque el tercer sector existe, y sabe valorar la comunicación con más verdad que muchas marcas.

Porque los relatos construidos desde la honestidad y los valores siempre vencen.

Porque hay que explicar a la sociedad que otra forma de hacer las cosas es posible.

Porque no pasa nada por cuestionar los discursos hegemónicos.

Porque generar valor es mucho más que colgarse la etiqueta de “RSC”.

Porque integrar es cohesionar.


Hoy sigo este camino convencida de que lo que estoy construyendo transformará vidas. Y podré decir, todo empezó en un punto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario